La TERAPIA FAMILIAR se caracteriza por ser un espacio seguro donde resolver los conflictos sin que escalen como en casa, mejorando la comunicación y recuperando la armonía. 

Desde la primera sesión, con la ayuda de un terapeuta totalmente parcial, buscamos fortalecer los recursos familiares y conseguir que los miembros de la familia actúen en colaboración, y no en rivalidad, para resolver sus problemas individuales y comunes.

El objetivo de cambio, más allá de la mejora en el bienestar y la armonía, se centra en ofrecer estrategias para modificar los patrones de interacción familiar y poder llegar acuerdos beneficiosos para todas las partes implicadas fomentando:

• La expresión segura y respetuosa de necesidades y emociones.
• La comprensión mutua
• El apoyo emocional entre los miembros de la familia.
• El desarrollo de estrategias de afrontamiento y habilidades de resolución anet problemas o situaciones específicas.

También disponemos de MEDIADOR FAMILIAR para aquellos casos en los que ya se ha decidido optar por el divorcio o separación.

El objetivo del mediador familiar es conseguir acuerdos pactados y beneficiosos para todas las partes, evitando al máximo las repercusiones emocionales para la pareja y, sobre todo, para los hijos (sin tener que llegar al punto de utilizar a éstos como parte de la negociación).

Para asesoramiento puntual, el ASESORAMIENTO PARA PADRES  acompaña a los progenitores ante qualquier duda sobre la educación de vuestros hijos ante situaciones como:

• Procesos de duelo
• Celos
• Límites y normas
• Procesos de divorcio
• Como fomentar la autoestima, etc.